Entrenadores personales para niños

Los padres recurren a entrenadores personales para sus hijos

Con el aumento de las tasas de obesidad infantil y la disminución de las clases de aptitud física, muchos padres preocupados están recurriendo a entrenadores personales no solo para ellos, sino también para sus hijos. Las últimas estadísticas de la Asociación Estadounidense de Obesidad muestran que el 30 por ciento de los niños de 6 a 18 años tienen sobrepeso y otro 15 por ciento son obesos. No es sorprendente que los padres estén buscando nuevas formas de combatir la tendencia creciente.

¿Son los entrenadores personales para niños la solución?

Puede que no sea la solución para todos los niños, pero para algunos niños un entrenador personal puede ser una excelente manera de aprender comportamientos saludables que durarán toda la vida. También es una gran manera para que un niño con sobrepeso obtenga resultados inmediatos y refuerce los beneficios de la condición física. Dado que la obesidad infantil predice la obesidad adulta con una precisión asombrosa, un buen padre de deportes es sabio alentar hábitos saludables temprano. Un entrenador personal puede ser otra forma de proporcionar dirección, estructura y estrategias que ayudan a crear un hábito de vida saludable que puede tener un tremendo impacto en la vida de un niño.

Otra razón por la que algunos padres contratan entrenadores personales para sus hijos es para mejorar el rendimiento deportivo y la capacitación en habilidades deportivas. Según la Academia Estadounidense de Pediatría, los niños de hasta 8 años de edad pueden beneficiarse del ejercicio de baja resistencia con pesos pequeños y de hecho se hacen más fuertes con poco riesgo de lesiones.

¿Es un entrenador personal adecuado para su hijo?

Un entrenador puede ser útil en los siguientes escenarios:

¿Qué tipo de entrenador personal es mejor para los niños?

Un entrenador personal que trabaja con adultos no siempre es la mejor opción para un niño. Aquí hay algunas recomendaciones para encontrar el mejor entrenador para su hijo:

Como padre, debe ser paciente y alentar a su hijo a aprovechar al máximo las sesiones. Para mejorar las habilidades motrices, la velocidad y la coordinación, los niños necesitan trabajar con un entrenador una o dos veces por semana durante tres o cuatro meses antes de desarrollar el hábito de hacer ejercicio y estar motivados para mantenerse activos por sí mismos.

Para los niños desarrollar un nuevo estilo de vida lleva tiempo, y los objetivos de usted, su hijo y el entrenador personal deben ser realistas y modestos.

Fuentes:

> La Academia Americana de Pediatría

> La Asociación Americana de Obesidad